22 de abril de 2009

Cuando nadie me ve

El telón se ha cerrado. Las luces se han apagado ya. El escenario se ha bajado de su altura pública cotidiana. Los aplausos han cesado. Y ahí me encuentro... solo ante Dios. Cuando el telón se cerró, las luces se apagaron y el escenario ya no es más, me encuentro conmigo mismo, con mis defectos, con todo aquello que detesto de mí. Cuando todo el aplauso y la admiración de otros cesa, me encuentro delante de Dios. Y delante de mí hay un espejo... un espejo que muestra verdaderamente quien soy. En mi intimidad, donde nadie me ve, soy lo que soy... con mis deseos más nobles pero también con mis errores más ocultos. Es allí donde la careta de la sonrisa se cae y la "buena onda" se traduce en lágrimas de sinceridad... lágrimas de quien sufre también, de quien busca con intensidad a Dios. Es frente a ese espejo que me doy cuenta que todo lo que soy es por la gracia de Dios... me doy cuenta frente a él que puedo ser sincero y cantar una desafinada canción con todo el sentimiento.

Cuando el telón se cierra y el público se fue, me encuentro conmigo... y me hallo preguntando a cada rato: ¿Por qué decidiste por mí? En ese momento su presencia me inunda y una libre paz inunda el lugar donde me encuentro... podría saber con certeza la respuesta: "Porque sí". Esa es la gracia de Dios que me impulsa a la santidad, a dejar de verlo con temor y a aceptar y no ganar su confianza.

Cuando las cortinas se cierran y el "amén" público a la oración ya no está, las palabras más triviales cobran sentido: "Gracias papá..." "Buen día Dios"... "te he extrañado hoy". Es una relación que amo, que deseo desde el fondo de mi corazón. Porque en su presencia he aprendido a aceptar mis limitaciones y errores. Y es allí donde la mano de apoyo se halla extendida constantemente para mí y la aceptación se respira en el aire aun cuando tengo defectos... ¿quieres que te ayude? - me pregunta.

"Te necesito... en lo alto y en lo bajo estás conmigo. No soy tan diferente a los demás... he cometido errores a lo largo de mi vida... y en realidad lo único que me hace distinto cuando las luces se apagan y la gente no está, es tu gracia que hace especial aquello que no lo es... que hace amable aquello que no tenía la capacidad de ser. Tu gracia que fluye como un río cuando damos la lucha contra el error mientras corremos libremente en medio de los problemas. Es posible ser libres en medio de los problemas y seguir cantando aun cuando los azotes son más fuertes y las desiluciones crecen... Y siempre aquí me tendrás: cantándote, como un adorador que me has hecho... como aquel llamado que un día oí en mi corazón. Es mi identidad... nací para adorarte y todos mis hijos adorarán tu nombre en sus vidas también. Y aunque no conozco sus rostros, ellos te buscarán y serán libres para correr a ti. Sobre ellos profetizo bendición y amor abundante..."

4 comentarios:

Welysima dijo...

Es por su gracia y su amor. Parece casi ilógico a ratos, pero es así.

Sabes que al leer tu publicación lo asocié a lo que David, (si tu tocayo), sentía, algo parecido a lo que he sentido y siento en este momento.
Te obsequio un extracto de uno de mis Salmos más queridos

"Sé tú mi roca de refugio
adonde pueda yo siempre acudir;
da la orden de salvarme,
porque tú eres mi roca, mi fortaleza.

Líbrame, Dios mío, de manos de los impíos, del poder de los malvados y violentos.

Tú, Soberano Señor, has sido mi esperanza; en ti he confiado desde mi juventud.

De ti he dependido desde que nací; del vientre materno me hiciste nacer.
¡Por siempre te alabaré!

Para muchos, soy motivo de asombro, pero tú eres mi refugio inconmovible.

Mi boca rebosa de alabanzas a tu nombre, y todo el día proclama tu grandeza.

No me rechaces cuando llegue a viejo; no me abandones cuando me falten las fuerzas..."

Salmos 71:3-9 (NVI)

PD: Me alegré de verte el domingo :D!
PD2: Gracias por pasar por mi blogk ;)
PD3: Si Dios quiere, tus hijos serán de lo más apretables que hay poh oyiiieee y obvio, le adorarán.

JamesRock7 dijo...

Bueno...

yo tiendo a mostrar todo
y si estoy podrido, los otros lo notan.

Igual fome tener que andar aparentando estar bien
y peor aún... no tener alguien para ser auténtico, que quiera comprenderte y tenga tiempo para escucharte.

Y a veces ni tanto tiempo hay pa pensar.

No ando muy ocurrente hoy...
lo siento amigo...

y fue bueno verte el dgo en la iglesia...

Un abrazo!!

Jaime.

tutolino dijo...

Tu blog es un vaso de Limón Soda con un sanguchito de jámón sandwich y queso para mí...
Es como una colación liviana, agradable y que me da alegría...

Es cierto lo del telón.
Es un alegría poder mirar a Dios para no mirarnos a nosotros mismos al final del día.

Otra vez.
Gracias.

tutolino dijo...

Me faltó decir que también me desafía... Pero güeno... Eso po'.

Dios te Bendiga, Menares (o debo decir, David??)

La cultura del balcón

Algunos gritaban por allá. Los de acá aplaudían y gritaban. "Llévense a la vieja loca", se escuchaba por ahí. Desde muchos balcone...