Esperar... confiar... orar... orar... confiar... esperar...
"Yo he vivido lo mismo que tú... te puedo aconsejar que..."
¿Alguno que lea este blog ha sentido que todas las palabras de ánimo chocan con una barrera que no se puede atravesar? Muchas veces es el choque entre lo que nos dicen las personas cuando estamos mal y lo que queremos escuchar... ¿Qué sucede cuando no se oye la voz de Dios cuando más lo esperamos? Es como si ansiáramos que Dios nos hable y le pidiésemos que nos hable en este preciso instante cuando estamos mal, pero Él guarda silencio. Es el choque entre lo que vivimos y lo que esperamos vivir.
4 comentarios:
...
...
Estamos orando
Cariños
=)
Puf...
yo entiendo esa cuestión.
Uno espera que te digan LA palabra que te tire para arriba, y nadie te la dice.
En fin, solo Dios nos comprende.
Así que, si estás falto de palabras de aliento, lee los salmos.
Hay cosas impresionantes.
Ve en los primeros 50 (o más, ahí te ves).
Hasta te podrías inventar una canción de ahí.
Eso no más...
Nos vemos pronto!!
Jaime.
Hola amigaso!!!!
Mmmmmm..... respecto a lo que comentas, creo haberlo vivido por lo menos en una oportunidad. Y el hecho de que se prolongue ese estado de ánimo tubo dos consecuencias: Dios trató con mi caracter y el momento de la restauración fue más sabroso y especial que en otras oportunidades.
Te quiero caleta!!!!
DTB!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
hola amigo feliz cumpleaños
perdoname por no ir!
te kiero mucho!
besos
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